El alcalde acusa a la subdelegada de ponerse "de perfil" ante la manifestación contra sentencia del 'procés'
Luis Salvador ha expresado que se "avergonzaba" de este "grupito de personas reducido instalado en la cultura del odio" y ha mostrado su "respeto" a la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado
El alcalde de Granada, Luis Salvador (Cs), ha acusado este jueves a la subdelegada del Gobierno en la provincia, Inmaculada López Calahorro, de ponerse "de perfil" ante la manifestación que reunió a unas 250 personas en contra de la sentencia del 'procés' catalán este pasado miércoles por la noche en el centro de la capital granadina.
En declaraciones a los periodistas, Salvador, quien ha expresado que se "avergonzaba" de este "grupito de personas reducido instalado en la cultura del odio", ha mostrado su "respeto" a la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que "son profesionales y hacen lo que se les dice".
Ha pedido, en este contexto, a la subdelegada que "no haga como" el presidente del Ejecutivo en funciones, Pedro Sánchez, "poniéndose de lado con lo que está pasando en Cataluña", siguiendo una "teoría del sanchismo" que Salvador ha descrito como "quedar bien con los nacionalistas, con Bildu, con ETA", y demás organizaciones que han sido "causa de dolor" en España.
La manifestación llegó a cortar totalmente el tráfico en la citada vía a la altura de la Subdelegación del Gobierno, situación que posteriormente se normalizó, según las fuentes policiales consultadas por Europa Press.
Aunque la protesta estaba autorizada desde las 19,00 hasta las 21,00 horas, la misma solo permitía la ocupación de unos de los dos carriles de la Gran Vía, sin llegar a imposibilitar el tránsito rodado. La movilización, según indicó la Policía, concluyó a la hora prevista sin que se registraran detenciones ni incidentes de consideración.
Jorge Saavedra, subraya que, tras su ratificación en Pleno, la ciudad "potenciará su especial relación con el municipio santaferino"
No se llegó a desarrollar el pasado 23 de febrero, terminando con denuncias cruzadas entre el alcalde y el edil socialista Miguel Gámez
