Cuenca ofrece la "lealtad" del PSOE al gobierno pero critica que el acuerdo haya sido un "mercado persa"

El ex alcalde ha subrayado que su partido ganó las elecciones si bien la "aritmética electoral" le ha llevado a que trabaje desde la oposición

Redacción  |  15 de junio de 2019
Francisco Cuenca introduce su voto en la sesión de investidura (ÁLEX CÁMARA)
Francisco Cuenca introduce su voto en la sesión de investidura (ÁLEX CÁMARA)

El alcalde saliente de Granada, Francisco Cuenca (PSOE), ha ofrecido la "lealtad" de su grupo municipal al nuevo equipo de gobierno local, que preside Luis Salvador, de Cs, si bien ha criticado el acuerdo con el que ha salido adelante, en lo que ha calificado "mercado persa" de la formación naranja con PP y Vox.

En su alocución como portavoz del grupo municipal socialista, en el Pleno de constitución de la Corporación local, Francisco Cuenca ha subrayado que su partido ganó las elecciones si bien la "aritmética electoral" le ha llevado a que trabaje desde la oposición.

 

A juicio de Cuenca, los representantes de PP, Cs y Vox han "intercambiado la legitimidad de un resultado electoral" por "otro tipo de intereses" que desconoce, con base en "proyectos más personales que colectivos", y en el marco de la "esquizofrenia que ha introducido la derecha" en España. "Si van a tratar a la ciudad como en estos últimos días, no lo vamos a permitir", ha agregado.

En los próximos cuatro años, Granada afronta proyectos "determinantes" para su futuro, después de haberse "reconectado" en los tres últimos años, cuando, ha agregado, consiguió "recuperar el prestigio" en el resto del mundo. Ha aludido al impulso del Aeropuerto Federico García Lorca o a la conexión por AVE, entre otros proyectos, y "después de años de desprecio".

"No vamos a consentir ni una afrenta más" desde los lugares que "ahora parece que son el espacio de toma de decisiones", en referencia a Sevilla, y Madrid, donde las direcciones de los partidos que han investido alcalde a Salvador han negociado mayormente su acuerdo.

Por su parte, el portavoz del grupo del PP, César Díaz, ha indicado que los próximos cuatro años el gobierno local trabajará "sin imposiciones de las mayorías sobre las minorías", con la premisa de que "primero" y "por encima de todo" ha de estar Granada.

"Nos comprometemos a dejar al margen los legítimos intereses personales para que estos no lastren el porvenir de esta ciudad", priorizando "el interés común", y una ciudad que "funcione hoy y funcione en el futuro", tras un "proceso complejo de negociación y cesión", en el que Díaz ha indicado que han renunciado los tres partidos.

Ahora se trata de "formar un solo equipo", con un "proyecto sólido y solvente para esta ciudad", para un "cambio", que es "imprescindible" pero que no se puede afrontar "sin el diálogo ojalá que constructivo con la izquierda de esta ciudad", ha resumido.

CS, ADELANTE Y VOX
Por su parte, el concejal de Cs Manuel Olivares ha defendido que el nuevo gobierno local "se va a dejar la piel", en un mandato "de puertas abiertas", que se caracterizará además por la "transparencia" y por "algo que se había perdido, que era el diálogo".

Ha resaltado el papel de la labor de los funcionarios municipales, y ha pedido a sus compañeros corporativos que piensen en sus hijos y en sus abuelos para llevar a Granada al lugar que merece.

Entre los "muchos" puntos a abordar, Olivares ha destacado la situación de "quiebra económica" que afronta el Ayuntamiento, con un periodo medio de pagos, que supera los 180 días. "Nos toca recuperar la economía", y "apretar el cinturón a esta casa", ha esbozado también el portavoz de Cs, con "un plan de ajuste que se cumpla". Ha apostado también por la recuperación del Observatorio de Movilidad.

Anteriormente, el portavoz de Podemos-IU-Adelante, Antonio Cambril, ha comenzado su discurso haciendo un alegato contra los cortes de luz en la zona norte, y la falta de compromiso que, a su parecer, han mostrado el resto de formaciones con esta problemática.

También ha aludido al "encarecimiento del valor de los alquileres" y a que Granada esté entre "las cinco ciudades más contaminadas" de España, como problemas a los que habrá de hacer frente el "alcalde o medio alcalde" de la ciudad, en referencia a un posible relevo durante el mandato en virtud del pacto, en el que Vox ha sido el apoyo de "la familia de las derechas".

"El destino de Granada se ha decidido en Sevilla y Madrid", ha lamentado Antonio Cambril, y se ha hecho "de manera mucho más descarada y grosera", que en otras ocasiones, ha agregado el portavoz de la confluencia, que denunciará "todo abuso, corruptela, o error que dañe" a la ciudad.

En el otro flanco político, el portavoz de Vox, Onofre Miralles, ha dado su "más sincera enhorabuena" al nuevo alcalde, y ha defendido el decálogo que su formación ha planteado a PP y Cs, para que la legalidad esté "por encima de todo".

Habrá una comisión de seguimiento de los contratos públicos, ha señalado Onofre Miralles, quien ha explicado que "la economía de la casa", en referencia al Ayuntamiento, "no puede dañar el bolsillo de los granadinos", y ha apostado por los principios de "austeridad, ahorro y planificación económica".

Asimismo, "el empresariado granadino no puede ver bloqueados por trámites burocráticos" sus proyectos, ha agregado Miralles, quien ha destacado la labor de su partido, que ha dicho que está "demonizado" pero que es "la derecha con principios", desde la "firmeza pero con amplitud de miras y con capacidad de diálogo".

 
 
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